Svalbard

¿Alguno sabéis dónde está Svalbard? ¿No? Ruega ¿Que ruegue qué? Que no, ¡que está en Noruega! Concretamente, se trata de una islilla (muy bonita, por cierto, al norte de donde vive Papá Noel. El Banco Mundial de Semillas de Svalbard, contiene más de 1 millón de muestras de semillas.

Una muestra se compone de unas 500 semillas, todas ellas heladas (de ahí que tenga sentido que esté en la punta más al norte de Noruega). Os preguntaréis, pero si no puede haber tantas semillas, pero sí, aunque no todas las especies de plantas de las 390.000 que se han descubierto producen semillas, la mayoría si lo hace y cada variante de cada especie produce un tipo de semilla diferente.

En Svalbard, la mayoría de las muestras provienen de semillas que son relevantes para la agricultura y la seguridad alimentaria. Esto implica que ni una décima parte de todos los tipos de semillas que hay se han guardado en este Banco, que está además a un cuarto de su capacidad.

Aun así, hay semillas provenientes de 223 países diferentes, siendo India el país de donde provienen más tipos. Las semillas se guardan en pequeños envoltorios y en cajas de madera, ocupando sorprendentemente poco y parece sacado de una película de Star Wars.

De hecho, el Banco “solo” costó 8,8 millones de €, que para un país nórdico, es una cantidad muy pequeña. Noruega es curiosamente el único país que lo financia, aunque hay colaboración internacional muy variada y aceptan donativos.

¿Y qué persigue este banco de semillas?

Este proyecto, aunque cueste poco y parezca poco útil, es de mucha relevancia, ya que sirve de reservorio de muchísimas de estas variedades de plantas que nos dan de comer. El cambio climático ya está generando grandes cambios en las condiciones de siembra y la seguridad alimentaria está amenazada.

Necesitamos contar con la máxima variedad a nuestro alcance para poder adaptarnos a lo que viene y seguir alimentando a las 8.000.000.000 personas que poblamos el planeta.

Sin duda el ser humano ha demostrado que es capaz de idear todo tipo de soluciones a los problemas que nos vienen. Por el cambio climático estos problemas cada vez serán más duros y de más difícil adaptación. Lamentablemente los menos pudientes no serán los primeros en disfrutar de estas soluciones.

Por ello, no podemos perder de vista tampoco la reducción de las emisiones y todo lo asociado con la transición ecológica que deben de acometer todos los sectores.

By Gonzalo M. Gómez Lezcano

Soy biólogo, experto en medio ambiente y cambio climático y conozco bien el ámbito de la sostenibilidad, que ha ganado mucha fuerza en los últimos tiempos a todos los niveles (social, empresarial, político, etc.). En ese sentido, antes de llegar a ReTree, trabajé en el ámbito de desarrollo y aplicación de políticas públicas a nivel nacional e internacional. Tuve la oportunidad de trabajar en dos de las tres grandes instituciones Europeas (Comisión y Parlamento), donde estuve involucrado en el desarrollo de legislación pública relacionada con el medio ambiente y diversos sectores (sobre todo pesca y biodiversidad). En ReTree estoy a cargo de todo lo relacionado con la sostenibilidad, impulsando el desarrollo de proyectos con nuevas empresas, que al final son los que financian todas las labores que nosotros llevamos a cabo con personas del ámbito local. Estamos en constante desarrollo de nuevas formas que permitan mejorar la salud de los ecosistemas que intentamos recuperar, además de desarrollar nuevas métricas que nos permitan medir y comunicar precisamente esas mejoras, buscando lograr una mayor trazabilidad y concienciación. En resumen, soy un enamorado de la naturaleza que tiene como objetivo dedicar todo su esfuerzo para lograr un mundo donde el desarrollo de la sociedad sea realmente sostenible y nos permita recuperar la naturaleza y convivir con ella.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *